
Se refiere al secado por congelación. Eliminando la humedad, en este caso, de los frutos que permite que el agua pase directamente del estado solido (hielo) al gaseoso (vapor) sin transitar por la fase líquida.
La importancia de la liofilización o deshidratación en frío radica en la capacidad de mantener las propiedades de los frutos minimizando daños.
Por tanto, se intentar mantener el máximo de vitaminas y antioxidantes de cada fruto.
